Hola amantes del mundo del Yoga, hoy os quiero hablar del Yoga para los niños, de cómo enfocar una clase y de cómo hacer para que no pierdan la concentración a través de la diversión. Os hablaré de la importancia del Yoga para el ser humano, de cómo hacer que los niños aprendan las técnicas milenarias del Yoga para desarrollar un cuerpo sano y una mente fuerte.
El Yoga en el futuro será de gran ayuda a los niños sobre todo en los momentos más complejos que la vida nos pone delante.
Si eres madre o padre y estás buscando una actividad para ti niño, el Yoga puede ser una excelente opción, lo aconsejo 100%. Si eres profe de Yoga y quieres empezar a enseñar Yoga a los niños, entonces este artículo es para tí y de corazón espero que lo encuentres interesante.
La clave de la enseñanza del Yoga para niños, en mi opinión, es la diversión a través del entretenimiento. !Los peques cuando practican Yoga deben pasárselo pipa!
Los niños y la concentración en el Yoga
Generalmente el único problema del Yoga para niños es la concentración. Sin embargo, si le interesa algo y se divierten, los niños tienen habilidades maravillosas para concentrarse. Por lo tanto, es necesario realizar clases entretenidas.
A los niños les resulta mucho más difícil sentarse tranquilos ya que sus mentes están más activas e inquietas que las nuestras. Esta energía mental necesita ser canalizada en actividad física productiva. Por lo tanto, los niños necesitan moverse, tanto mentalmente como físicamente, a través de la variedad de actividades e ideas creativas de los profes. Tenemos que “atrapar” la mente de los niños y engancharlos mentalmente a través de su imaginación. En el Yoga para niños, ya sea relajación, meditación, asanas y pranayama, para obtener su concentración, tenemos que jugar con la diversión a través del mundo de la imaginación.
Los niños y las asanas: concentración y diversión
Empezar a practicar yoga a una edad temprana desarrolla una base excelente en la vida.
Con su flexibilidad natural y el sentido del equilibrio, por lo general los niños encuentran mucho más fácil adoptar las posturas que los adultos, y pueden progresar rápidamente.
La mayoría de los niños son naturalmente aventureros y todo lo que necesitan es un poco de estímulo.
Un padre o profe de Yoga debe ayudarlos a ponerse en la posición correcta, pero con cuidado de no forzar las posturas, ya que los huesos y los músculos siguen creciendo.
La mayoría de los niños son grandes imitadores y si ven a un amigo o un familiar que practica asanas regularmente, ellos desearán probablemente también realizar la práctica.
Para un profe de Yoga, la enseñanza a los niños puede ser especialmente entretenida. Se puede aprovechar el hecho de que las asanas tienen nombres de animales (serpientes, pájaros, lagartos, perros), objetos (velas, arados, pinzas, montañas) y formas (una bolita como Pawanmuktasana o un triángulo como Trikonasana). Puedes dejar a los niños rugir como un león, arquear la espalda imitando a una cobra o ser un árbol o una montaña. Utiliza la imaginación de los niños que, practicando la flexión hacia adelante, se imaginan que son como un libro que, plegándose, se cierra. La postura de equilibrio sobre los hombros (la postura de la vela o Sarvangasana) puede parecer a una vela en un pastel de cumpleaños. Puedes hacerles saludar al sol o a la luna.
Relajación y meditación en el Yoga para niños
Los niños también son capaces de relajarse y meditar practicando Yoga si enfocamos su mente en la dirección correcta: acuérdate, concentración con diversión.
La meditación, es de gran valor cuando un niño crece, fortaleciendo el poder de concentración de un niño. En las escuelas donde los niños practican Yoga y se enseña la meditación, los maestros han observado una gran mejora tanto en el trabajo de clase como en la interacción grupal.
Las técnicas de meditación sobre el Ser, el Alma, el Espíritu, las llamadas meditaciones Sáttvicas, quizás no sean las más adecuadas para los niños (resultan muy complejas hasta para los adultos).
Sin embargo, las visualizaciones son una gran ayuda para mantener la concentración de los peques firme y sin perder la diversión. Tanto en la relajación como en la meditación, podemos hacerles imaginar cuentos de hadas, bosques, parajes de todo tipos, animales o personajes.
Las meditaciones con mantras son también muy recomendadas en el Yoga para niños, a ellos les encanta cantar y terminarán concentrándose en el mantra y entreteniéndose con el sonido de la música.
En el Yoga para niños, tanto los tiempos de relajación como las posturas físicas, se mantienen por tiempos más cortos.
Respiración y Pranayamas para niños
Los niños también pueden practicar técnicas de respiración y Pranayama como Anuloma Viloma, Kapalabhati o Brhamari Pranayama. Aquí te dejo un par de artículos sobre las técnicas de Pranayama por si no las conoces:
Una vez más, si los niños están practicando Yoga, Pranayama en este caso, la imaginación es fundamental: concentración y diversión es la clave para que su mente no se vaya a otro sitio. Los niños para concentrarse tienen que estar entretenidos en lo que hacen, sobre todo si están practicando algo un pelín aburrido como las técnicas de respiración. Necesitan muchos estímulos para no estresarse con estos ejercicios.
Para que le guste Anuloma Viloma, por ejemplo, los peques se pueden imaginar cómo los círculos que el aire forma en la respiración alterna, se transforman en rayos de luz capaces de darle los superpoderes que ellos quieren.
En el caso de Kapalabhati, aconsejable a partir de los 9 o 10 años de edad, los chicos pueden pensar que ellos son como un coche y así están recargando las baterías para poder correr y jugar. Y así siguiendo…
¿A qué edad los niños pueden practicar Yoga?
Los niños pueden comenzar a practicar yoga a cualquier edad. Sin embargo, antes de los 6 o 7 años de edad, es más difícil mantener la atención del niño.
Cuanto más chicos son los niños, más difícil será para ellos entender las instrucciones y mantenerse concentrados en algo concreto.
Los niños muy pequeños tienen menor coordinación mente-cuerpo. Habrá entonces que tener mucha más paciencia con ellos y enfocar el Yoga, por lo pronto, a la pura diversión en el lugar que a la la concentración y a la técnica correcta.
En el Yoga para niños (sobre todo si son muy pequeños) es mucho más efectivo y divertido si se practica a través de la imitación más que a través de la instrucción (o los pobres acabarán aburriéndose).
Beneficios del Yoga en los niños
El Yoga ayuda el correcto desarrollo físico del músculo, fuerza, resistencia, flexibilidad y buena postura. El Yoga puede contrarrestar el daño de estar sentado mucho tiempo para estudiar, jugar o mirar la tele.
Desarrollo de la concentración de los niños, su coordinación, la fuerza de voluntad, la paciencia y la resistencia mental.
Emocionalmente, les ayuda a afrontar los cambios hormonales (sobre todo con el Pranayama Anuloma Viloma) y para vivir su vida de manera más tranquila y relajada, encontrando su equilibrio y armonía física, emocional y espiritual.
Namasté